Yo tengo toda la edad que tengo
apuesto que lo merezco
la lluvia sobre mi pelo
de todo el rumor
recuerdos.
Cuan facil fue entrar al espejo
y salir de él
en otro momento será el momento
con voz de papel
y mi alma arrugada
seré niño otra vez,
en alguna parte de ninguna noche
no supe del viento
que siempre volvió
a robarse los sueños
y las cortinas blancas
de la mañana.
Todo bailaba
nada caía en esa resaca
de palidez sombría
en esa dolorosa
ceremonia.