Aparte de la palabrería, me declaro sinceramente en contra de todo lo que sea genuinamente cierto.
No admito estar de acuerdo y me declaro en silencio.
Lloro por ser solo una mueca y posarme con una tristeza elegante "nada siutica", a la orilla de la memoria.
Quise ser poeta, quise ser cantautor...quise ser artista y
solo soy un viejo ridículo, culto eso sí, que vivirá para siempre según sentencia
mi nieto con total seguridad.
la caja de pandora y sobrevivir con cierta dignidad a esta eternidad echada a correr en mi camino por Vicente...Para eso son los abuelos ¿no?
De niño solía escribir sobre asuntos de grandes, tenía un cierto
miedo a ser niño, no sabía a veces de que hablaba pero oía todo a mi alrededor
y fingía nada más que para ser grande...
Inventaba historias increíbles, aprendí a mentir y a soñar con la
misma eficacia, no tuve grandes carencias, tuve todo lo que un niño pudiera
desear...sol, mar, gatos, arboles, lluvia, viento, cerros y un cementerio donde
jugar.
También aprendí a nadar, a leer, a escribir y a jugar casi al
mismo tiempo.
Entre la Pequeña Biblioteca de las Ultimas Noticias, El Billiken,
Caleta Abarca, la calle Portales y la subida Roma con su gasómetro, sucedió mi
niñez...
Había suficiente espacio en el mundo para Juan XXIII, el Che,
Luther King, Malcolm X, Violeta Parra, Los Beatles, Neruda, Picasso, Sartre,
Dalí y el LSD.
Sin TV por cable, sin Internet, la imaginación lo era todo...
Quería jugar y crecer pero no demasiado, soñaba con ser invisible, volar y posiblemente ser inmortal...
Había tiempo para todo, siempre había tiempo.
Si hay tiempo para ser felices, soñadores y creativos...seremos inmortales.
Mientras Vicente construye una hermosa casa en Minecraft donde viviremos,
yo escribo..."si la inmortalidad nos regala una canción, un poema, un sueño indestructible...
posiblemente nadie sepa de que está hecho el olvido".
Y mientras mi nieto tararea "Diamonds" y sigue construyendo.......yo miro por la ventana e insisto...¿ De qué está hecho el olvido?
