Tú crees que decides
que sirve para algo la distancia
cuando te vas a caminar
cuando te marchas de una vez
y otra vez hasta morir.
Tú crees que decides
no saber nada de ti, solo rumores
ecos infantiles, llenos de miedo
cuando logras atrapar tu futuro
los sueños en blanco y negro
el Quitapenas de Roma con Portales
la vieja calle Adela Edwards
o el telefono 51730.
Tú crees que decides
el bus que esperas cada mañana,
los que te gobiernan, alguna moda
la ropa que llevas, el titulo colgado
con orgullo en la pared
las noticias que miras con desgano
el color de tu cuarto por las noches
la comida en el congelador
la calle con olor a flor de lavanda,
los recuerdos en la caja de cartón
son las culpas, lo que niego
lo niego sin estar seguro
de mi nombre, del gato que tenía
de la muerte que avanza cínica
de las fechas imposibles que recuerdo
nunca quise lo que dije que quería
me llevo el ruido del mar
con sus gaviotas a todas partes